Los argentinos, primeros en inglés en América Latina

10, November

El Índice de Dominio del Inglés 2017 de Education First (EF EPI) ubicó a Argentina en el puesto 25 en el mundo, y a ...

El Índice de Dominio del Inglés 2017 de Education First (EF EPI) ubicó a Argentina en el puesto 25 en el mundo, y a la cabeza de América Latina. Aunque se toma sobre una muestra no representativa, la prueba funciona como una referencia del nivel de manejo del idioma. Neuquén, La Plata y Rosario las ciudades argentinas con mayor puntaje.

Los argentinos son capaces de utilizar el inglés para participar en reuniones vinculadas con su área de experiencia, escribir emails profesionales sobre temas conocidos o comprender la letra de una canción. El nivel promedio de inglés en el país, en cambio, no alcanza para leer un periódico, hacer una presentación en el trabajo o entender programas de TV. La mayoría de los argentinos tampoco sería capaz de negociar un contrato con un nivel nativo de inglés o leer textos avanzados con facilidad.

Estas conclusiones se desprenden del Índice de Dominio del Inglés 2017 de Education First (EF EPI), que midió el manejo de esta lengua en 80 países y territorios, a partir de los datos de más de un millón de adultos que durante el año pasado resolvieron la Prueba Estándar de Inglés de EF (EF SET), un examen estandarizado de habilidades de comprensión oral y lectura. Con 56,51 puntos, la Argentina quedó en el puesto 25 sobre 80 países, con un “nivel medio” de inglés. El país cayó 6 lugares con respecto al año pasado, cuando el EF EPI lo había ubicado en el puesto 19, equivalente a un “nivel alto”. De todas maneras, los argentinos siguen a la cabeza de América Latina en el dominio de inglés según este examen.

Un dato fundamental es que la población que participa de esta prueba no necesariamente es representativa de los países, ya que es una muestra auto-seleccionada y el test es online (o sea que las personas sin acceso a Internet o no habituadas a las aplicaciones online están excluidas). Según explican desde Education First, “la inclinación de la muestra tendería a mostrar calificaciones por encima de lo normal al excluir a los más pobres, menos educados y personas menos privilegiadas”.

El ranking está encabezado por Países Bajos (71,45 puntos), seguido de Suecia (70,40), Dinamarca (69,93) y Noruega (67,77). El primer país no europeo en aparecer es Singapur (puesto 5, con 66,03 puntos). El top 10 lo completan Finlandia, Luxemburgo, Sudáfrica, Alemania y Austria. Los peores resultados se registraron en Argelia, Camboya, Libia, Irak y Laos (puesto 80, con 37,56 puntos).

El desempeño de los argentinos no quedó muy lejos del de otros países latinoamericanos. Los más cercanos son República Dominicana (56,31 puntos, puesto 26) y Costa Rica (53,13 puntos, puesto 35). El informe señala que “el rango de puntajes en América Latina se está estrechando, ya que los países con menor dominio están mejorando más rápido que sus vecinos con niveles más altos“. Así, poco más de 10 puntos separan a la Argentina, el país con el nivel de dominio más alto de la región, de El Salvador, con el más bajo.

El informe comparó los desempeños de algunas ciudades argentinas, y encontró que los mayores niveles de inglés están en Neuquén (59,46), seguida de La Plata (59,02), Rosario (57,48) y Buenos Aires (56,60). Al comparar por región, en primer lugar se destaca la Patagonia (59,33 puntos), seguida de la Región Pampeana (57,80). Y en sintonía con la tendencia global, las mujeres argentinas (58,41) tienen mayor dominio del idioma que los varones (54,68).

Para mejorar el nivel de inglés de los estudiantes latinoamericanos (ubicados por detrás de los europeos, los asiáticos e incluso los africanos), el informe de Education First recomienda “mejorar primero el dominio del inglés de los maestros“. Algunas propuestas: “Evaluar a los maestros y capacitar de nuevo a quienes no alcanzan los niveles esperados”; así como “contratar maestros de inglés mejor calificados, mejorar su capacitación antes del servicio y estandarizar los planes de estudio de inglés”.

El documento destaca algunas políticas públicas, como el programa Languages without Borders de Brasil, que busca preparar a los estudiantes universitarios para estancias en el extranjero; el Plan Ceibal en inglés de Uruguay; el programa Proyecta 100.000 de México, un fondo público de becas que pretende enviar a 100.000 estudiantes mexicanos a los Estados Unidos para cursos intensivos de inglés; y el programa Panamá Bilingüe, que exige 300 horas extracurriculares al año de clases de inglés para los estudiantes de secundaria, y de 5 a 10 horas de clases durante la semana para estudiantes de preescolar a tercer grado.

El relevamiento de EF plantea que “los países con mayor dominio del inglés tienden a exportar más servicios, tener mejor acceso a Internet y más inversión en investigación y desarrollo que los países con niveles menores”. El estudio aclara que “es poco probable que exista una simple relación causal entre el inglés y cualquiera de estos indicadores; por el contrario, es posible que estén en un círculo virtuoso”. Debido a que un mayor dominio de la lengua facilita el intercambio de ideas y servicios, “más personas tienen acceso a oportunidades internacionales, lo que a su vez mejora las competencias en el inglés entre los adultos”.

Fuente: Eduprensa