Muchos estudiantes piensan que a través de la educación de nivel medio o la educación de nivel superior adquirirán los conocimientos que les permitirá desarrollarse en el mundo del trabajo.
Sin embargo esto no es así. Mientras los jóvenes se frustran al buscan un trabajo que no encuentran, muchas empresas no son exitosas a la hora de buscar el talento que necesitan. Existe una brecha.
La performance académica es importante ya que refleja el esfuerzo y el nivel de aprendizaje adquirido, pero la teoría no servirá de nada hasta que no se ponga en práctica.
Las empresas no se fijan únicamente en el título o las notas, sino que cada vez más valoran otros aspectos, como la experiencia y las soft skills.
La realización de prácticas profesionales, tanto durante el periodo de estudios como al finalizar estos, es la mejor opción para adquirir experiencia real en las empresas.
Aumentan las posibilidades de conseguir un trabajo y permiten empezar a construir una red contactos y una visión real de lo aprendido.
Unono, agencia digital española especializada en reclutamiento ‘millennial’, ha resumido los valores que se adquieren durante la realización de prácticas profesionales y que no se enseñan en la formación formal:
- Aprender a “hacer”, poner en práctica todo lo aprendido.
- Funcionamiento del mundo laboral. Cada vez más colegios y universidades reconocen la importancia de preparar a sus alumnos para el mundo real.
- Capacidad de resolución de problemas y gestión del estrés. Los practicantes adquieren habilidades para afrontar la resolución de problemas reales.
- Organización, responsabilidad, compromiso y disciplina. Son soft skills fundamentales. Saber que el trabajo que realiza un aprendiz en prácticas genera impacto real, y es importante para la empresa, hace que se involucre más para responder como se espera de ellos.
- Habilidades comunicativas e interpersonales Se trata de habilidades fundamentales a la hora de contratar y retener talento. Todas las empresas buscan involucramiento, compromiso y trabajo en equipo.
- Adquisición de contactos profesionales. Las prácticas profesionales son una oportunidad para conocer a profesionales que, además de aportarles conocimientos, podrán recomendar y ayudar cuando finalice la práctica.
- Descubrir de verdad qué es lo que te gusta. Las prácticas puedes descubrir qué parte de la profesión que has elegido te atrae más, comprobar que aquella área que te llamaba más la atención en la universidad no te gusta tanto en el entorno laboral real, o entrar en contacto con nuevas posibilidades profesionales que ni siquiera contemplabas.
La conexión entre educación y trabajo debe profundizarse en América Latina. Se trata de una de las llaves para incrementar empleabilidad y desarrollar talento para el futuro del trabajo.