En España, ASEMPLEO analizó el fenómeno de la sobrecualificación

08, noviembre

ASEMPLEO, la patronal de Agencias de Empleo, y Analistas Financieros Internacionales (Afi), han presentado un ...

ASEMPLEO, la patronal de Agencias de Empleo, y Analistas Financieros Internacionales (Afi), han presentado un informe que analiza el fenómeno de la sobrecualificación en España e identifica a qué sectores y colectivos afecta más, así como también las comunidades autónomas que presentan un mejor ajuste entre formación y empleo.

El fenómeno de la sobrecualificación parecía ser consecuencia del empleo creado durante la recuperación económica española, en la que el fin principal fue crear puestos de trabajo, sin tener encuenta su calidad. “Este era un pensamiento lógico, teniendo en cuenta que, tras aumentar el número de sobrecualificados en los primeros años de la recuperación, la proporción comenzó a caer en 2016″, afirman los autores de”Avance del Mercado Laboral ASEMPLEO-Afi”.

El informe presentado este año por ambas entidades destaca un aumento en el número de trabajadores que ocupa puestos que no se adecúan a sus capacidades y a su formación. Así, la sobrecualificación ha vuelto a una tendencia de crecimiento, con un incremento del 4,5% hasta el segundo trimestre de 2018.

“Los infracualificados se han mantenido estables en el entorno del 3,6% y los cualificados han aumentado ligeramente (1,2% más que en el 4T16), sin embargo, han reducido su representación sobre el total de trabajadores en siete décimas, representando al 42,5% de los cotizantes”, explican.

Se registró un especial aumento entre las mujeres, manteniendo la brecha de género en torno al 10%. “La sobrecualificación ha aumentado un 3% entre los hombres y un 3,1% entre las mujeres. Siendo así, el 49,3% de los hombres trabajadores están sobrecualificados, frente al 59,4% de las ocupadas”.

El informe muestra información valioso para las distintas franjas etarias. “Si bien es el colectivo joven (entre 16 y 24 años) el que más ha contribuido al crecimiento del empleo en estos años (20,6% desde el 4T16), también es el que presenta las mayores tasas de paro y de sobrecualificación, afectando esta última al 66,4% de los jóvenes que están trabajando”, manifestaron.

En este sentido, apuntan a un problema en el sector de la construcción, donde a pesar de ser el que más contribuye a la creación empleo y aquel que registra un 7,3% de cualificación, “no destaca por la concordancia entre empleo y formación, dado que sólo un cuarto de los trabajadores empleados en él, está cualificado”.

Por su parte, en la industria extractiva y los servicios profesionales, han aumentado los cualificados en estos años, pero son los que presentan un mayor desajuste: 7,2% y 5,3% de sobrecualificación respectivamente.

Los empleos temporales muestran un mejor ajuste entre empleo y formación ya que presentan un ajuste superior al de los indefinidos. Este fenómeno se manifestó durante los primeros años de recuperación, en los datos que mostraban la reducción de la sobrecualificación que se produjo en 2016, y la tendencia se incrementó sustancialmente en el periodo analizado.

Los contratos temporales han reducido la sobrecualificación desde el 14,4% en el 4T16, hasta el 4% en el 2T18. En el caso de los contratos indefinidos, sucede lo contrario: solo el 1,5% del total de contratos firmados en el periodo analizado, están adecuadamente cualificados.

Por otro lado, la Comunidad de Madrid presenta el mejor ajuste y Canarias la que menos. “Las CCAA en las que más ha crecido el empleo en el periodo analizado, son las que han experimentado un mayor crecimiento de la sobrecualificación”, detallan los autores del estudio. En este sentido, ha crecido un 7,4% en las Islas Baleares, un 7% en Extremadura y un 5,3% en las Islas Canarias. En el lado opuesto se sitúan Navarra y Asturias, que son las CCAA en las que más ha disminuido (1,2% y 0,8% respectivamente).

Por otro lado, destaca el hecho de que sean las CCAA con menores tasas de paro, las que presentan tasas más altas de sobrecualificación. En concreto, País Vasco, Cantabria y La Rioja, cuyos sobrecualificados representan el 59,4%, 58% y 56,4% respectivamente, sobre el total de los ocupados.