Durante 2015 se vivió el fin del ciclo de las materias primas, especialmente en la actividad minera, donde las empresas pasaron del aumento de la producción a una fuerte reducción de costos para resguardar sus márgenes operacionales.
La caída del 26% del precio del cobre a lo largo de 2015 ha tenido un gran impacto en los ingresos que perciben las empresas, lo cual impulsó la aplicación de una serie de recortes.
El resultado más visible de estas medidas ha sido la destrucción del empleo en el sector minero. Según datos publicados por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), hubo una reducción del 5,2% de personas empleadas por el sector para el tercer trimestre de 2015. De un total de 235.810 personas empleadas a principios de año se ha caído a 223.390 ocupados, es decir 12.420 puestos menos. Si se compara con los números de octubre de 2012, se observa una caída del 14.4% (37.600 empleos menos).
Los recortes de personal fueron una de las herramientas usadas por las compañías para aumentar los ahorros. Desde el sector minero se ha comentado que otras maneras de reducir el gasto son la renovación de personal por mano de obra más barata o el pago de menores incentivos.
Fuente: Diario Finaciero