Si estás por elegir una carrera universitaria, leé este artículo.
20, febreroPor Martin Padulla para staffingamericalatina Este artículo es para vos, que estás en el último año de tu educación secundaria. Te voy a necesitar activo. No se trata ...
La evidencia demuestra que el crecimiento es condición necesaria pero no suficiente. Necesitamos crecer en ...
La evidencia demuestra que el crecimiento es condición necesaria pero no suficiente. Necesitamos crecer en productividad y competitividad para alcanzar el desarrollo. El conocimiento parece ser la clave.
Por Martín Padulla
Los mercados laborales de América Latina están cambiando con la sofisticación de los negocios que se desarrollan en sus países en crecimiento. Sin embargo existen dos factores que cambian a una velocidad mucho menor a la deseada y esperada. Persiste la baja productividad y una menor inversión en términos relativos y comparativos en investigación y desarrollo.
El crecimiento sostenido experimentado en los últimos años no ayudó a fortalecer la competitividad. Algunos países como Argentina, Colombia, México, Chile y República dominicana han hecho avances en términos de investigación y desarrollo, sin embargo falta mejorar el intercambio de información y fundamentalmente el incremento del capital humano.
Si pensamos en las cadenas de valor globales, resulta evidente que entrar en ellas sólo produciendo commodities no parece ser la ecuación más ventajosa. El desafío está en la especialización, encontrar una ventaja competitiva que permita integrarnos. Amalgamar acciones que nos permitan resolver el tema de la desigualdad.
Hoy nos encontramos con datos que indican que una significativa cantidad de personas ha dejado la pobreza extrema y ha entrado en una categoría que muchos denominan “clase media”. Sin embargo estamos ante un segmento de gran vulnerabilidad en el que si una persona clave del grupo familiar se enferma, por ser parte de la economía informal, toda su familia vuelve a la pobreza. Estamos hablando de millones de personas sin una cobertura de salud, una jubilación o un vehículo. Es esta vulnerabilidad la genera alta tensión ya que con las expectativas de haber mejorado, se esperan oportunidades que no siempre aparecen. Junto a éstas, conviven las altísimas tasas de desempleo juvenil, la informalidad y la indignación. Para referenciar ejemplos de otros continentes, el caso de Túnez es claro: durante diez años ese país tuvo 5% de crecimiento, sin déficit y con deuda baja. Para la mirada de un economista todo parecía funcionar muy bien. Sin embargo, llegó la “primavera árabe” y enfrentó una crisis social y política de relevancia debido a que la gente estaba insatisfecha por la falta de trabajo para los jóvenes y la gran economía informal.
La evidencia indica que el crecimiento económico es una condición necesaria pero no suficiente y hay que generar políticas activas que promuevan la cohesión social y el bienestar de los ciudadanos. Cohesión social y bienestar se logran a través de la dignidad que otorga un trabajo.
No es posible pensar en el mundo del trabajo sin abordar el problema educativo en América Latina. En algunos países ha aumentado de manera considerable la inversión en este rubro, pero la calidad continúa muy lejos de lo requerido por un mercado laboral cada vez más volátil, dinámico y exigente. Esto significa que además de invertir, hay que tener en cuenta la eficacia de esa inversión; esa será la referencia para saber si esa inversión es funcional o no para el futuro de los países.
Existe una correlación directa entre los problemas de formación y capacitación y la baja productividad y competitividad empresaria. Cualquier proceso de mejora de la productividad y la competitividad, requiere de procedimientos que agreguen valor a los productos y servicios. En estos procedimientos entran en juego factores tecnológicos. Para llevar adelante todo esto, se requiere de una formación técnico-productiva flexible y dinámica que mejore las habilidades de los trabajadores y emprendedores.
Hoy existe una brecha entre los países de la región y los países más avanzados. La gran cantidad de empresas pequeñas y unipersonales es una de las razones que explican la baja productividad y la competitividad. Si no logramos reducir la brecha de formación con los países más avanzados, América Latina puede caer en la trampa de la productividad que se acentúa cuando empresas extranjeras invierten en uno de nuestros países y demandan trabajadores con determinadas calificaciones o especializaciones. Tal como plantea Hasan Tuluy, Vicepresidente del Banco Mundial para América Latina, la región debería seguir haciendo un uso inteligente del capital extranjero para reemplazar su escasa capacidad de ahorro y mejorar la calidad de la inversión. El intento de mejorar la competitividad en base a mano de obra barata y tipo de cambio devaluado parece ser políticamente inviable y económicamente inadecuado. La opción de generar políticas activas de formación para el empleo llevadas adelante a través de articulaciones público-privadas parece ser una opción más sostenible.
El concepto de empleabilidad será cada vez más numérico y debería estar en el tope de las prioridades de nuestros gobernantes. Sólo fortaleciendo la calidad y las competencias en sintonía con la dinámica del sistema productivo, la región podrá crecer en productividad y competitividad.
El trabajo, el emprendimiento y la economía informal en general, generan un círculo vicioso que castiga el crecimiento.
La base del desarrollo es la productividad y la base de ésta, es el conocimiento. Un conocimiento pertinente, ajustado a la demanda.
Más que nunca es necesario incrementar nuestro capital humano, fomentar políticas tendientes a la formalización de la economía y otorgarle dinamismo al mercado laboral con articulaciones público-privadas para aumentar productividad y competitividad. Crecer en productividad y adaptar las estructuras productivas (y los marcos regulatorios) a las nuevas realidades. Estos dos factores son esenciales para un crecimiento económico formal e inclusivo que se traduzca en mayor bienestar para quienes habitamos nuestra región.
Nadie quiere compartir la pobreza, el desafío es compartir la prosperidad.
Acerca de Martín Padulla
Managing Director de Staffingamericalatina. Martín Padulla es Sociólogo (USAL), MBA (UCA) y experto en mercados laborales. Publicó Trabajo Flexible en Sudamérica y Entornos normativos para Agencias Privadas de Empleo en América Latina, dos libros acerca de las nuevas realidades del trabajo.
mpadulla@staffingamericalatina.com
Acerca de Staffingamericalatina
Es el único medio digital independiente especializado en los mercados laborales de América Latina.
Genera y difunde contenidos, investigaciones y desarrollos sobre temáticas como Empleabilidad, Empleo Juvenil, Formación para el Empleo, Trabajo Decente, Agencias Privadas de Empleo, Políticas activas de Empleo, Teletrabajo, Articulación Público-Privadas de acciones tendientes a la generación de Trabajo Decente, Empleos Verdes y Responsabilidad Social Empresaria.
Es el punto de encuentro para empresas, proveedores, candidatos, empresas de servicios, académicos y profesionales independientes de América Latina y el Mundo.
Sigue a staffingamericalatina en Twitter @staffingal