Según un informe elaborado por la Sociedad Chilena de Gestión de Personas la coexistencia de tres generaciones está cambiando el modo de gestionar las empresas.
Un estudio realizado por la Sociedad Chilena de Gestión de Personas (SCGP) arrojó interesante información acerca de las tendencias de los Recursos Humanos en Chile.
Si bien son cada vez más las mujeres que ocupan cargos jerárquicos en las organizaciones, los puestos de mayor nivel siguen siendo ocupados por una proporción mayor de hombres.
Por otro lado, actualmente la mayoría de las organizaciones están formadas por personas de tres generaciones distintas. Baby Boomers, Generación X y Generación Y, comparten espacios y proyectos laborales. Si bien gran parte de los puestos de mayor jerarquía son ocupados por Baby Boomers y Generación X, se observa que la Generación Y comienza a abrirse paso y, en algunos casos muy puntuales, ocupan cargos de gerencias en RRHH.
Las organizaciones valoran de distintas maneras la penetración de la Generación Y. Según la encuesta realizada por la SCGP a 50 líderes chilenos, los profesionales de la Generación Y son vistos como: creativos, innovadores, tecnológicos, competitivos y con gran apreciación por su vida personal, lo que puede provocar que sus líderes los piensen como poco comprometidos y cortoplacistas.
Más allá de las reservas que los líderes Baby Boomer y Generación X pueden tener a la hora de analizar el ingreso de la Generación Y a las organizaciones, el 70% de ellos lo considera una oportunidad.
En este sentido, es interesante observar cómo las organizaciones están re-evaluando y modificando sus acciones para atraer y retener a individuos valiosos de la Generación Y. En Chile algunas empresas están introduciendo cambios a sus esquemas de compensaciones –y la mitad de las que aun no lo hicieron están considerando hacerlo-, teniendo en cuenta las siguientes variables como parte de la compensación total: remuneración fija y variable, plan de carrera, beneficios, calidad de vida y reconocimiento.
Una de las principales acciones que vienen implementado las empresas chilenas es la flexibilización del permiso con o sin goce de sueldo, buscando acercarse a lo que los jóvenes de la Generación Y buscan: conciliar vida laboral y personal. La mayoría de estos permisos son brindados para que el empleado pueda estudiar en el exterior o realizar un viaje extenso.
Otra medida importante es la inclusión de los jóvenes en los proyectos corporativos, un hecho que es sumamente apreciado por ellos ya que valoran sentirse parte de la organización y obtener nuevos conocimientos. La creación de estacionamientos de bicicletas en las empresas y el fomento desde la organización para el desarrollo de prácticas deportivas son otras prácticas que comienzan a desarrollarse en el mercado chileno.
Según el estudio, todavía hay un largo camino por recorrer. Brindar mayores posibilidades de desarrollo formal, mayor flexibilidad tanto en lo que refiere a horario como modos de trabajo, más reconocimiento y mejorar el balance entre vida personal y laboral son conceptos que habrá que profundizar para atraer y retener a los mejores.
Se trata de repensar las organizaciones con una visión evolutiva para adaptarse y sacar mayor provecho de las ventajas que brinda la Generación Y. ¿De qué hablamos cuando nos referimos a falta de compromiso? ¿Cómo podemos alinear las grandes capacidades de la Generación Y con los objetivos de la organización? ¿Es necesario revisar la estrategia de negocio? ¿Como juega la cultura organizacional en este proceso? ¿Debemos reconsiderar la forma en que estamos gestionando la diversidad?
Reflexionar frente a estos interrogantes parece ser el desafío inmediato para las organizaciones chilenas.