Educación y Empleabilidad.

25, marzo

Identificar las desconexiones entre Educación y Empleo es la clave para desarrollar las habilidades que permitan el ...

Identificar las desconexiones entre Educación y Empleo es la clave para desarrollar las habilidades que permitan el ingreso de los jóvenes al mercado laboral.

 

Por Gabriela Vlasich*

para staffingamericalatina

 

En la actualidad la empleabilidad constituye una problemática de radical importancia. La misma refiere a las posibilidades que tiene una persona de conseguir empleo y se encuentra directamente relacionada con la formación, experiencia, habilidades y cualidades que posee esa persona.

 

Dentro de este ámbito de análisis, un tema de particular interés es el vínculo que existe entre la educación media y el empleo, especialmente en como la primera impulsa la construcción de un camino hacia y dentro del mercado laboral.

 

Al respecto, uno de los mayores interrogantes que surgen es si, efectivamente, la educación media, está satisfaciendo los requerimientos que existen para ingresar al mercado laboral, particularmente al formal.

 

En relación a este tema, desde la división de educación del BID, se publicó un estudio titulado “Desconectados. Habilidades, Educación y Empleo en América Latina” (Bassi M, et al, 2012), focalizado en analizar la conexión entre las habilidades requeridas por los empleadores y las generadas por la educación secundaria.

Dichas habilidades pueden ser categorizadas en dos grandes núcleos: por un lado las cognitivas -habilidad intelectual general-; por el otro lado, las socioemocionales –autoeficacia, habilidades sociales, autocontrol, entre otras-.

 

Las habilidades que han probado ser relevantes para desenvolverse adecuadamente en el mundo laboral –fundamentalmente las socioemocionales-, pueden adquirirse, modificarse y consolidarse con la educación media. Este hecho es de gran importancia, ya que la escuela secundaria puede actuar como catalizador para el fomento de competencias adicionales, incluso cuando la escuela primaria haya sido deficiente en esos aspectos. Es por ello que, desde esta perspectiva, la escuela secundaria puede pensarse como una segunda oportunidad para impulsar el desarrollo de habilidades cuyo impacto en la vida de estos jóvenes sería sumamente significativo.

 

El principal problema entonces, y el que aquí se plantea, es la existencia de una desconexión entre el desarrollo de las habilidades socioemocionales y cognitivas que impulsa la educación secundaria y aquel demandado por el mercado laboral formal. Dicha desconexión podría deberse a que el sistema educativo no ha respondido de manera activa al aumento o a los cambios de habilidades exigidos por los empleos existentes en el mercado laboral actual.

 

En este sentido encontramos una digresión. En la región los Estados han realizado importantes inversiones en infraestructura y salarios de docentes, así como también han expandido la obligatoriedad escolar. Como resultado de dichas políticas, el número de inscriptos a la escuela secundaria ha crecido en las últimas décadas. Sin embargo, esto no se ha traducido en una mejora significativa de la calidad de la educación brindada ni en un aumento del porcentaje de estudiantes que culminen la formación secundaria. Justamente, la desconexión a la que se hace mención, no se ha reducido, sino que viene en aumento.

 

Una de las posibles explicaciones que brinda el BID a esta desconexión es explicada en términos de oferta y demanda. Entre los factores de oferta se encuentra el gran crecimiento de la cantidad de jóvenes con educación secundaria. Entre los factores de demanda, podemos contar el incremento de la demanda de trabajadores con educación superior impulsado por  cambios en el mundo laboral, tales como: cambios en el comercio internacional; desarrollo de tecnología complementaria a las habilidades de los trabajadores; reformas de política económica. La combinación de ambos factores ha generado una caída de los retornos a la educación media

 

 

Así, una de las principales fuentes de la desconexión entre educación y empleo y de deserción escolar radica en la  falta de pertinencia de los contenidos de los programas de estudio ofrecidos en las escuelas y en la ausencia de oportunidades educativas posteriores al grado de secundaria.

 

Consecuentemente el desafío se encuentra en transformar a la educación secundaria en un ámbito donde se impulsen y desarrollen las habilidades necesarias para la inserción exitosa en el mercado laboral formal, fomentando oportunidades y adecuando los contenidos impartidos de manera tal que sean pertinentes con los desafíos que presenta el mundo del trabajo actualmente. Este desafío es sumamente complejo, pero identificar las desconexiones entre educación y empleo constituye un avance en el camino para lograrlo.

 

 

*Antropóloga

Líder de Proyectos

Trafwe LATAM HR Advisors